Preparación

1. Se puede preparar con alcachofas naturales, En ese caso, se limpian de las hojas duras y se trocean y se reservan rociándolas con zumo de limón, para que no se oxiden. Yo las he preparado con alcachofas congeladas, que no necesitan preparación previa
   
2. En un cazo con agua ligeramente salada, se cuecen las alcachofas durante unos diez minutos, o hasta que están tiernas.
   
3. Mientras tanto, en una sartén se pone a calentar el aceite y se doran los ajos laminados y las almendras. Cuando empiezan a dorarse, se añade la cebolla y el puerro y se saltea todo junto durante unos minutos. Cuando se ha pochado el sofrito, se añaden las alcachofas y se saltea todo junto.
   
4. Se añade el vino blanco y cuando el alcohol se ha evaporado, se añade el agua de cocción de las alcachofas y se deja cocer todo junto durante unos 15 minutos.
   
5. Ahora se tritura todo pasándolo por una batidora. Se añade la nata y el queso rallado y se deja cocer unos cinco minutos más. Se retira del fuego y se pasa por un chino y se sirve bien caliente.