Preparación

1. En una fiambrera o un bol con tapa, se mezclan todos los ingredientes: harina, sal y levadura, se remueven bien y se añade el agua. Se mezcla suavemente para que se hidrate bien la harina, se tapa y se deja reposar durante una hora.
   
2. Pasado este tiempo, se pliega la masa como si fuera un sobre. Como la masa se pega mucho, es bueno mojarse las manos con un poco de agua o bien enharinarlas. Se vuelve a tapar y se deja reposar en el frigorífico hasta el día siguiente.
   
3. Sobre la mesa enharinada, se vuelca la masa, se parte en dos con una rasqueta. Se humedece bien un trapo de cocina y con cuidado se pasa una parte de la masa y se deja sobre el trapo. De este modo se le quedaran adheridas las semillas.
   
4. En una bandeja alargada, se cubre el fondo con copos de avena, se pasa la masa, y de ahí se pasa a la bandeja de hornear cubierta con papel de horno. Se giran los dos extremos, como se ve en el video.
   
5. Con la otra mitad se procede del mismo modo.
   
6. Se calienta el horno a 250º con la bandeja de horno dentro. Con cuidado de no quemarte, se desliza el pan a esta bandeja, y para que haga un poco de vapor, se introduce en la bandeja inferior del horno un vaso de agua o unos cubitos de hielo.
   
7. Se hornea 10 minutos a 250º y se baja la temperatura a 200º y se hornear durante unos 30 minutos más. Cuando se saca del horno, se deja enfriar en una rejilla.